![]() |
¿Eres un mal estimador? La culpa es de la evolución
¿Dónde esta la evolución? Los sesgos que son innatos aquellos que no se aprenden a través de experiencias en el mundo tienen explicaciones evolutivas. Algunos son simplemente subproductos de la evolución de alguna otra característica. Por ejemplo, los sesgos en nuestra percepción de una distancia recorrida podrían ser un efecto colateral de como nuestra mente ha evolucionado a estimar el paso del tiempo de una manera eficiente. Otros sesgos son adaptaciones en si mismos. Por ejemplo, cuando la fuente de un sonido se acerca a nosotros, el sonido se hace más fuerte. Tal vez, nuestro sesgo de sobre-estimación en el cambio de un sonido que se intensifica es como un sistema de alerta temprano, para sensibilizarnos sobre un potencial peligro que se acerca, y que probablemente ha sido favorecido por la selección natural. Aquellos humanos con este sesgo perceptivo deben haber tenido mas probabilidad de escapar a un ataque y sobrevivir para reproducirse que aquellos que no tenían el sesgo (sin embargo, más estudios serian necesarios para determinar si ese sesgo es verdaderamente una adaptación). Los científicos han advertido, desde hace mucho tiempo, la ilusión tamaño-peso y formularon diferentes hipótesis para explicarla: ¿es un efecto colateral inconsecuente por como nuestra mente estima la masa, o hay algún valor oculto en subestimar consistentemente el peso de objetos grandes? Nuevas investigaciones sugieren que este error podría ser una adaptación con raíces en un importante aspecto de la evolución humana a veces ignorado: la habilidad de tirar. Tomar una pelota y arrojarla puede ser un juego de niños, pero en realidad, se basa en una compleja serie de habilidades y conocimiento, así como en músculos y huesos, que otros primates no tienen. Los chimpancés tienen brazos ineficaces para tirar y no son muy buenos para acertar. Y mientras la habilidad de tirar puede no parecer tan útil hoy (a menos que usted esté en la liga de beisbol, por supuesto), para nuestros ancestros que vivieron hace medio millón de años atrás, debe haber sido una habilidad invaluable. Tirar rocas y lanzas pudo haber permitido a los antiguos humanos traer una presa desde la distancia y tener la ventaja del elemento sorpresa. Una buena habilidad para tirar pudo haberle dado a los primeros humanos una gran ventaja selectiva sobre otros en términos de su habilidad de obtener comida. ¿Como la ilusión-tamaño peso ha ayudado a la habilidad de tirar? Cuando uno selecciona un objeto para tirarlo a una larga distancia, el tamaño y el peso son clave. Es mas difícil tirar un objeto grande y liviano a una larga distancia que tirar un objeto pequeño del mismo peso. Simplemente imagine que usted tira una pelota de playa y un rodamiento o ruleman del mismo peso. Usted podrá tirar el rodamiento mucho más lejos que la pelota de playa. Por lo tanto, cuanto mas grande es un objeto, más pesado tendrá que ser para poder ser tirado lejos; sin embargo, cuanto más pesado es un objeto, más trabajo será requerido para tirarlo lejos. Balancear estas dos cuestiones para seleccionar el objeto ideal para tirar no es una tarea simple. Científicos de la Universidad de Wyoming e Indiana decidieron poner a prueba si la ilusión tamaño-peso ayuda a la gente a seleccionar los mejores objetos para tirar. Ellos convocaron a personas para que juzguen la facilidad con que se tiraría una serie de objetos de diferentes tamaños y pesos, y también les pidieron que juzguen que objetos tenían pesos equivalentes. El mes pasado, anunciaron sus resultados: ¡los objetos evaluados como equivalentes para tirar eran también de pesos equivalentes! Esto sugiere que nuestra percepción de la masa de un objeto en comparación con otros objetos serviría como un estimador de su facilidad para ser tirado. En otras palabras, si los investigadores no están equivocados, cuando usted sostiene una caja de manteca y una caja de galletas saladas y percibe que la de manteca es mas pesada, usted esta advirtiendo realmente la facilidad con que estos objetos pueden ser arrojados. Ambos pesan lo mismo, pero su cerebro esta definiendo inconscientemente que la manteca seria un mejor objeto para tirar. Por supuesto, usted no va a tirar latas de sopa o cajas de manteca a una bestia salvaje que pase por allí en algún momento. Los estilos de vida de los humanos han cambiando substancialmente desde que nuestra anatomía y fisiología evolucionó, pero nuestros cuerpos y nuestros cerebros aún llevan las marcas de nuestra profunda historia evolutiva. Entonces, la próxima vez que usted se impresione con un pase de 60 yardas para una anotación o levante una roca para tirar en el lago, deténgase un momento para reflexionar sobre los cientos de miles de años de evolución que han modelado lo que significa actuar, sentir, pensar y tirar como un humano.
Discusión y preguntas relacionadas
Referencias
|
![]() |
|||||||||
![]() |
View this article online at: Pitcher image from robletcherpa's photostream and used under the Creative Commons license. Understanding Evolution © 2021 by The University of California Museum of Paleontology, Berkeley, and the Regents of the University of California |
![]() |